dijous, 8 de gener del 2009

Bus-ateu


Avui gairebé tots els mitjans de comunicació fan ressò de la campanya ‘Bus–ateu’ que comença a Barcelona.

Un dels blocs que acostumo a donar un cop d’ull, i que recomano, publica un escrit que acompanyo, ‘Probablemente’, crec us agradarà i pot ésser una bona forma de treure’n partit.


Probablemente….

YA se pasea por España el “bus-ateo”. No se trata propiamente de un autobús, sino de un singular anuncio publicitario, pagado por unos incrédulos proselitistas de origen británico, que campea en la popa y en los laterales de los autobuses urbanos. El texto dice así: “probablemente Dios no existe. Deja de preocuparte y disfruta de la vida”. Estrambótica afirmación que está dando que hablar a medio mundo.

Como uno tiene la fea costumbre de tomar el rábano por las hojas, me he fijado sobre todo en la primera palabra: “probablemente”. Fue Carlsberg, la conocida cerveza danesa, quien la puso de moda para su publicidad. Carlsberg se autoproclamaba “probablemente la mejor cerveza del mundo”, y los expertos en márquetin descubrieron que el adverbio tenía éxito; daba una imagen de seriedad y también de respeto hacia las opiniones contrarias. Tanto es así que incluso la adoptó una funeraria privada de Madrid para proclamar, con la solemnidad que caracteriza a estas beneméritas empresas, que ellos eran “probablemente” los que prestaban un mejor servicio.

A mí nunca me cayó bien el adverbio. Me recordaba a esos otros anuncios que manejan estadísticas sacadas de la manga para dar la impresión de rigor matemático: “4 de cada cinco dermatólogos recomiendan…” Francamente, uno espera que, cuando alguien quiere venderte un producto, lo defienda con pasión y sin matices. A los hispanos —no sé a los británicos— nos gustan las verdades rotundas y nos encanta proclamarlas con vehemencia, dando por supuesto que las opiniones contrarias siempre son absurdas y los discrepantes, cretinos.

Probablemente el inventor del bus-ateo pensó que su propaganda libertaria y antirreligiosa quedaría mona si la matizaba con un adverbio como el que nos ocupa. Craso error, amigo. Ese probablemente es provocador. Nada más ponerme al teclado del ordenata ya se me han ocurrido tres o cuatro letreritos, a cuál más ingenioso, para pegarlos al pie del tuyo. Desde el “probablemente te equivocas, colega”, hasta otros menos correctos que ni siquiera Kloster se atreve a reproducir.
En todo caso, conste que estoy a favor del autobús y espero verlo por Madrid antes de que se les acabe el dinero a sus patrocinadores. Cuando circule por mi pueblo será un poco más sencillo hablar de Dios, y nadie podrá acusar a los cristianos de meternos en conciencias ajenas ni de hacer un “ilícito proselitismo religioso”.
Pongamos que Kloster está sentado en la terraza de una cafetería con un amigo; pasa el anuncio por delante de las cañas de cerveza y mi colega aprovecha la ocasión:

—Por cierto, ¿qué te parecería hacer un retiro espiritual de tres días para pensar en eso?

—¿En eso?

—Sí, en la existencia de Dios, en lo que cuenta Dios en tu vida, en cómo disfrutar de verdad sin mirar para otro sitio…

Sospecho que, gracias al anuncio, nos vamos a hinchar a hacer apostolado. Van a conseguir que ya nadie esconda la cabeza debajo del ala. Probablemente en España se hablará de Dios a todas horas.

La segunda parte del mensaje (“no te preocupes y disfruta de la vida”) merecería un comentario más largo. Probablemente el genio que lo ha inventado tiene una idea puritana y triste de la religión, muy en la línea de alguna mentalidad de origen protestante.

Gracias al bus-ateo ahora tenemos la posibilidad de explicar que, si Dios no existiera, disfrutar de la vida sería muy complicado, sobre todo a partir de los 60 años, cuando el placer más refinado que uno concibe es la anestesia total.

Los católicos sabemos que el anuncio del bus tendría más sentido si dijera “no te preocupes, Dios existe. Aunque te duela, la vida tiene sentido: disfrútala”.

Amigos incrédulos, poned muchos autobuses de ésos, por favor. Y Dios, que existe (sin adverbios), os lo pagará… probablemente.
PUBLICADO POR ENRIQUE MONASTERIO http://pensarporlibre.blogspot.com/